Desde hace unos días estamos
leyendo en la prensa y escuchando en nuestras reuniones "turísticas"
que gran parte de la oferta hotelera andaluza, y en particular de la Costa del
Sol, va a cerrar en los meses invernales, es decir, de noviembre a marzo.
Obviamente, nunca se puede
generalizar, ya que estoy seguro que hay muchos hoteles que aprovecharán los
meses de menor ocupación y rentabilidad, para hacer una reforma integral de sus
instalaciones, cosa lógica y necesaria.
Pero creo que también todos coincidiremos en que otras decenas de
hoteles, con esa excusa, cerrarán sus instalaciones, cuando en verdad podrían
seguir abiertos sin ningún problema, ya que muchas de esas reformas se
concretan en cambio de mobiliario, actuaciones tecnológicas, modernización de
decoración, etc. Parece evidente, que al
igual que en otras zonas turísticas insulares, lo que hacen es simplemente
cerrar para ahorrar en determinados costes, por ejemplo, el laboral.
Pero esa situación la considero
demasiado contradictoria por varios aspectos, e ilógica con visión de destino,
por otros muchos factores, económicos y turísticos. Solo hay que hacer un breve análisis para
llegar a la conclusión de que parece una medida cortoplacista, sin tener en
cuenta la situación de crecimiento obtenida en la temporada alta y la necesaria
mejora de la situación en los meses invernales, y eso no pasa por cerrar, cada año,
un mayor porcentaje de plazas hoteleras.
A continuación, señalo algunos
de los indicadores, por lo que considero ese cierre de contradictorio e
ilógico, sobre todo por el buen año turístico que llevamos, en la ocupación e
ingreso, y porque no podemos acostumbrarnos a “abrir” cuando las cosas están
muy bien, y “cerrar” cuando no sabemos cómo vendrán:
- Según la Organización Mundial del Turismo, en el primer semestre de 2014 la actividad hotelera ha tenido un comportamiento muy positivo, y la previsión es que siga ese crecimiento.
- Según STR Global, los hoteles españoles logran en el verano el mayor incremento del RevPar (ingreso por habitación) de toda Europa.
- La media de crecimiento por habitación disponible en España, ha sido muy superior a la media europea.
- El lobby turístico español Exceltur, señala en su barómetro sobre la Rentabilidad y el Empleo Hotelero, publicado el 21 de noviembre, que los ingresos por habitación disponible se incrementaron en los destinos costeros en un 6%, y tuvieron un incremento de los precios de un 5,7%.
- Exceltur señala que de los municipios turísticos con mayor crecimiento del RevPar hotelero, a la cabeza está Marbella (114 €), y la Costa del Sol se encuentra entre las principales zonas turísticas en el crecimiento de este indicador.
- Málaga es la ciudad, entre los principales destinos urbanos, que más ha crecido el ingreso por habitación disponible, ascendiendo al +18,6%.
- El RevPar de los hoteles de la Costa del Sol y Provincia de Málaga, es un 10,3% y un 9,2%, respectivamente, con respecto al crecimiento medio nacional.
- Los viajeros hoteleros de la Cosa del Sol se han incrementado en un 6 % de enero a septiembre de este año, con respecto a 2013.
En definitiva, que aumenta el
número de clientes, de pernoctaciones, el precio de venta de las habitaciones,
el ingreso por habitación disponible, el gasto del turista, ... Además, todos esos incrementos fueron mayores
que la media de los producidos a nivel nacional o europeo, ... y no puede ser,
no debe ser, que la solución sea cerrar el 40 % de las plazas hoteleras en la
Costa del Sol, tal y como señalan distintos representantes hoteleros y
sindicales.
Para un producto en concreto se
podría entender, para un destino turístico internacional, para la imagen de
marca, para el sector en general, para el empleo, para el ritmo de crecimiento
de la economía, ... no, no se puede entender.
Insisto, hay muchos hoteles que
deben cerrar porque necesitan hacer reformas integrales. Pero no debemos hacernos trampas en el
solitario y argumentar que por cambios de mobiliario, decoración o mejora de
algunas habitaciones, un hotel tiene que cerrar cinco meses. Apoyo a los hoteleros en que hace falta una
reforma fiscal, medidas proactivas de apoyo a la mejora de la cualificación de
nuestra oferta, redimensionamiento en el IAE, ayudas para la inversión en
infraestructuras de ahorro energético, etc., pero en lo que no puedo estar de
acuerdo, en absoluto, es en cerrar tan alto porcentaje de la planta hotelera, sobre
todo porque es un daño demasiado grande al empleo y a la imagen de la Costa del
Sol.
Cinco meses de bajada de
turistas en el destino, con la consiguiente pérdida de ingresos turísticos,
directos e indirectos, de pérdida de empleo (también directo e indirecto), de
cierre de otras empresas complementarias al hotelero, de bajada de la actividad
económica en general, ..., y de pérdida de competitividad turística.
Además, desde esos mismos
hoteleros, se pide potenciar la estrategia de demanda, mayor esfuerzo en la
inversión de promoción para que se llegue a más turistas, sin darnos cuenta que
ese esfuerzo no sirve de nada sin una estrategia conjunta vía oferta. Son las paradojas de la vida. Tenemos a
Turespaña, a Turismo Andaluz, a los Patronatos de Turismo, a los Ayuntamientos,
..., haciendo promoción turística por donde pueden ..., o quieren, con el
objetivo de atraer a más turistas en temporada baja para romper la
estacionalidad, y podrá suceder que cuando esos turistas alemanes, belgas o
finlandeses, decidan venir y se encuentren que los hoteles están cerrados ...,
tengan que alojarse en otras tipologías de alojamientos, … algunas de ellas
ilegales.